martes, 18 de octubre de 2011

RAZONES PARA EL RETRASO

Como es del conocimiento público, en Michoacán las campañas (gobernador, 113 presidentes municipales y diputados) están en la fase terminal, pues el próximo día 13 de noviembre -carretadas de recursos de por medio, cochupos, componendas y acarreados de los tres partidos en disputa- tendrán su momento clave en las urnas. Tal como era de esperarse, también los miembros de las actividades artístico culturales tienen su momento, normalmente los instantes finales de las campañas donde la realización de foros y encuentros con los candidatos son la tónica.

De ahí que, transitando en las pasarelas y presentando propuestas a diestra y siniestra, ocupado en esos menesteres fortuitos he dejado de atender la publicación del blog por lo que ofrezco una disculpa al lector hipotético de este medio.

Si pudiéramos hacer un balance más o menos cercano a todo lo que sucede y nos consta, diríamos que es "normalito" en estos casos que los candidatos -de cualquiera de los partidos-, ni idea muestren de lo que en el ámbito de las actividades artísticas y/o culturales sucede, no en vano Michoacán es pionero de una Ley de Cultura expedida en el 2007 y cuyos propósitos no pasaron de lo  publicitario hasta ahora 2011, en que se publicó el Reglamento correspondiente, acuoso como cualquier letra hasta hoy muerta. No pocas voces han señalado a lo largo y ancho del país que esta sociedad, la mexicana del siglo XXI, lo que muestra enfermo y en estado terminal es el alma. De poco sirven las carreteras, las promesas de mejoras salariales, las promesas de una mejor y más eficaz economía -promesas y más promesas de otras muchísimas campañas anteriores- si lo que realmente enferma es el alma de un pueblo carente de educación, valores y sentido de realidad; donde la educación institucionalizada, los valores cívicos, la sensibilidad y el sentido de pertenencia como seres humanos no existen; y donde la educación artística, la educación institucionalizada formal etc. no tienen sentido para el educando y el educador. De ese tamaño es la ignorancia y de ese tamaño es el proceso aculturizador irreversible...


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